Una Sola Voz
Ricardo Mejia Cano
Una manera simple y confiable de medir la confianza en la economía de la población es preguntándole si cree que sus familias estarán mejor en los próximos 5 años.
Según el Barómetro de Confianza de Edelman realizado a finales del 2023 en 28 países, incluidos Argentina, Brasil, Colombia y México, la confianza se desplomó. La mayor caída fue en los cuatro países de Latinoamérica, donde la pérdida del empleo, la inflación y la alimentación son las principales preocupaciones.
En el 2023 los 4 países eran gobernados por dirigentes de extrema izquierda. Gobiernos que quieren restringir o eliminar la iniciativa privada. Sin planes de mejora en la educación, aunque aparecen de últimos en las pruebas internacionales de PISA.
La desconfianza en estos 4 países entre gobierno y el sector privado es el doble del promedio. Presentan el mayor nivel de polarización de todos los países encuestados.
Para sostenerse los cuatro gobiernos promueven la lucha de clases y quieren estatizar la economía. Esto aleja la posibilidad de trabajar unidos por un salto social y una mejora en la calidad de vida de la población más marginada. Pareciera que su meta es llevar a toda la población a la pobreza, como ya pasó en Venezuela.
Para el 73% de los encuestados en los 4 países se perdió el respeto y la formalidad. Se perdió el tejido social que permitía mantener cierta unidad y establecer propósitos comunes.
Los problemas de equidad, desarrollo, educación, justicia, nunca los resolverá el Socialismo S. XXI practicado por estos gobiernos y tampoco se resolverán si el sector privado no hace mayores esfuerzos por mejorar en equidad, madurez política, comunicaciones, medio ambiente, etc.
Curiosamente más de la mitad de los encuestados en estos 4 países quiere ver mayor colaboración entre gobierno y sector privado y que juntos desarrollen planes ambiciosos para mejorar en todos los indicadores.
La confianza en el sector privado en estos 4 países es del 64%, muy por encima del 45% en los medios y 37% en los gobiernos. Más impactante es que el 80% de los empleados encuestados confían ampliamente en sus empleadores y más del 50% considera que sus gobiernos dan información falsa o engañosa.
Para el 76% de los encuestados en los 4 países el sector privado debe trabajar en la unión de los diferentes actores, en la recomposición del tejido social y los empresarios deberían combatir las falsas noticias y la desinformación.
Desafortunadamente los partidos políticos que defienden los valores democráticos van cada uno por su lado y los empresarios son incapaces de trabajar en un frente común.
Según el estudio la población espera mayor responsabilidad empresarial y política de los industriales. ¿No deberían estos alfabetizar a sus trabajadores sobre la importancia de votar, divulgar en épocas de elecciones las cualidades y defectos de los diferentes candidatos, los riesgos, amenazas y oportunidades de mejora que cada uno pueda representar? ¿Trabajar por el mejoramiento de la calidad de vida de sus trabajadores y de la comunidad?
Las juntas directivas deben acompañar a la gerencia en la formulación de la estrategia y por tanto deben conocer bien el entorno. ¿No deberían entonces estudiar en detalle encuestas como la de Edelman y conocer lo que piensa la población de los empresarios y lo que espera de ellos?
¿Entenderán los lideres de los partidos políticos y los empresarios que sus electores y sus clientes quieren que se unan en una sola voz y defiendan los valores democráticos?